lunes, 29 de octubre de 2012



En Bolivia
Niños Trabajadores: cuando ya no se trata de un juego.

La ciudad de Cochabamba, una de las ciudades más desarrolladas de Bolivia, donde puedes encontrar varias clases de empleos y donde puedes ver a varios tipos de personas trabajando. En ese contexto es que vemos que no todos los que trabajan son mayores, también hay niños quienes cada día se ganan su alimento.
Varios de estos niños son personas quienes de una u otra manera entraron a la vida laboral, ya sea como apoyo a sus familiares o a parte para poder ser un sostén económico en sus familias.

Según estudios de varias organizaciones como ser Audiovisuales Educativos (AVE) o Mosoj Yan estiman que actualmente el número de niños trabajadores se va incrementando cada año más.

Razones

A raíz de ello es que surge la pregunta ¿A qué se debe eso?

Anel Pérez, quien desde que era niña vende duces y chicles en la terminal de buses, relata que ella empezó a vender a modo de ayudar económicamente a su mamá y a su familia; y porque no podía estar sola con sus hermanas en su casa.

Una niña trabajadora, Angélica López relata que ella trabaja por problemas de carácter familiar “desde chiquita he trabajado porque mi mamá y mi papá se han separado, he trabajado vendiendo”.

Varios casos como los de Anel y Angélica se repiten en toda la ciudad, donde cada vez podemos ver más niños trabajadores merodeando las calles, vendiendo, lustrando, trabajando en un taller etc. 

Trabajo infantil: ¿Qué significa para los niños trabajadores?

Cada día estos niños van a su lugar de trabajo, volviendo se parte de su rutina, sin embargo queda la pregunta ¿Qué significará trabajar para un niño?

Karla Salinas, trabajadora social que lleva aproximadamente 25 años colaborando a los niños trabajadores dice que los niños no lo ven necesariamente como un trabajo, sino como una actividad cotidiana familiar “En la experiencia que  he tenido con ellos es ayudar, ellos están viendo como una ayuda, nunca lo han visto como trabajo, es parte de la actividad familiar, es como una de las actividades como tender la cama, como sacar la basura de la casa, estar lavando los platos; entonces lo ven como una parte más de sus actividades que cumplen en la familia generalmente”.

Luis Yelincic, encargado de recursos de Mosoj Yan, una ONG que trabaja y capacita a los niños trabajadores hace referencia a dos puntos acerca de lo que es trabajar para un niño “trabajar para un niño vendría a significar ejercer su derecho para ganar su propio dinero, pero por otro lado también trabajar puede significar una fuente de estrés y depresión extra que tal vez un niño a cierta edad no debería tener que enfrentar.”

Ambas definiciones contextualizan bien lo que es trabajar y estudiar para un niño, sin embargo la realidad no se basa solamente en el trabajo, sino que también se enfoca en la escuela, donde no siempre los niños trabajadores son tratados con respeto.

Estigmatizaciones en la escuela y en la calle

Sobre este tema Karla relata los problemas que suelen tener varios niños con sus profesores “Muy pocos de ellos entienden “si ayudan” y también hay otros extremos “hay pobrecito, él había sabido trabajar pues, por eso no ha hecho” entonces los estigmatizan como al niño pobrecito, el que tiene que ayudar a la familia, el que no ha podido hacer la tarea, entonces esos dos extremos también son dañinos para él”.

Anel, que desde primer plano vivió esta realidad explica que no siempre los profesores tienen esa predisposición de entender a los niños trabajadores y que en la mayoría de los casos tienden a menospreciarlos justamente porque ignoran la realidad de esos niños “muchos de los profesores trabajan en función de ver al niño como el niño que tienen papá, mamá, mesa, silla y tiene una lámpara para hacer sus tareítas”.

Ambos extremos son malos sin lugar a dudas, pero es un pensamiento que sigue estando presente en los profesores.
 
“Cuando falla la comunicación en estas ideas es donde muchas veces lo que se ve más o menos perjudicada al niño se le está desmotivando  para que estudie” explica Luís respecto al poco entendimiento que tienen los profesores de este tipo de vida.

Estas estigmatizaciones sin embargo no sólo ocurren con los profesores, sino que también está presente en la sociedad, quienes al ver a estos niños en las calles tienden a semejarlos con la droga, el alcohol etc., y de la misma manera existen personas quienes los sobreestiman “oye tu eres trabajador, pobrecito, a muchos de los niños no les gusta que les digan eso” Aclara Karla.

Trabajar: Pros y contras.

Convivir cada día con esa realidad, de ir recorriendo las calles cochabambinas, buscando a quien venderle un dulce, a quien bolear sus zapatos etc., o esperar en el cementerio para limpiar alguna lápida ya forma parte de la cotidianeidad de estos niños, ya es parte de su diario vivir, con todo lo bueno y lo malo que implica.

Normalmente cada persona al toparse con un niño trabajador se le viene a la mente todas las cosas negativas que implica tener una vida así, obviando los aspectos positivos que puede tener el trabajar y el estudiar a la vez.

“Creo que esos niños tienen una gran ventaja, muchas más ventajas que  nosotros que nunca hemos trabajado, personalmente yo hablando con ellos, son niños que a los ocho años saben cuidarse, uno, saben relacionarse con personas adultas, tienen muchas más habilidades manuales, incluso intelectuales que otros niños que no han estado en esa actividad” afirma Karla, quien también habla acerca de que estas habilidades no son aprovechadas ni por la sociedad y mucho menos por los profesores para su correcta educación.

Soledad Guzmán, docente universitaria y especialista en estudios sobre el trabajo infantil afirma que estudiar y trabajar da valores que solo estudiando no se consiguen, en especial una buena administración del tiempo, el trabajo y el esfuerzo.

Apoyando lo dicho por Soledad, Luís dice “ayuda a que el niño desarrolle un sentido de responsabilidad, porque la idea es que tiene que rendir tanto en el colegio como en su trabajo digamos, o sea si no trabaja no viene, entonces por tanto tiene que darle ganas, ya desde pequeños si esa fuera digamos la arma dinámica de una ética de trabajo, de esfuerzo, de disciplina, si es que logra balancear ambas responsabilidades”.

“El trabajo es para que tengas algo de beneficio para vivir, un futuro para una situación y para valorarte” opina Angélica, que ya en la universidad sigue alternando el trabajo con el estudio.

Trabajar y estudiar no presenta solo aspecto positivos, también existen una serie de desventajas que afectan a buen desarrollo de los niños, y sobre todo a su desempeño escolar.

“Están siempre interrumpidos por bulla, peleas, inclemencias del tiempo, porque todas las niñas no vienen de bazares, no vienen de supermercados, están vendiendo en las arterias de la ciudad, entonces cualquier momento hace viento, hace frío, entonces ellas tienen que acomodarse a eso, muchas veces pierden los cuadernos o manchan los cuadernos, esa es la dificultad más fuerte que tienen ellos, de realizar sus actividades, que les piden en los colegios y muchas veces no tienen el apoyo de una educadora que tenga digamos un poco más de experiencia al respecto para apoyarles” explica Karla.

Por su parte Luís explica “Va a ponderar más la actividad que entiende le beneficia más, en este caso se promueve pues la deserción escolar de una u otra manera, si no hay suficiente disciplina, el tiempo y la exigencias del trabajo son demasiado demandantes  va a haber un índice de deserción escolar, o sea la persona no va a valorar tanto el hecho de estar ahí sentado, para él va a ser pérdida de tiempo”.

La realidad

Según lo establecido por la UNICEF cualquier tipo de trabajo infantil debería ser prohibido y penalizado por las leyes de cada país, sin embargo en Bolivia esto no se da por diversos motivos.

“Entiendo que a veces se maneja un discurso de que “no, que tú no tienen que trabajar, que deberías sólo estudiar”, que en realidad es todo lo que nosotros desearíamos que suceda, pero la realidad económica de nuestro país y de los países de Latinoamérica, los países en desarrollo no dan mucho para tener esa dinámica” explica Luís.

“Hacia un tiempo socializaba una información sobre el trabajo que realizan los niños en el campo, en las áreas rurales, y yo planteaba la posibilidad de entender los procesos educativos ligados a la actividad agrícola que realizan los padres, y los que me escuchaban eran miembros de UNICEF, había gente de otros lados, pero los de UNICEF se alarmaron dijeron “pero cómo, eso es explotación laboral, eso es maltrato a los niños” pero las lógicas del trabajo en el ámbito rural son totalmente normales, un niño de tres años está trabajando con sus padres”  Aclara por su parte Soledad.

En ese sentido el trabajo infantil en Bolivia es algo que se ve día a día, y en ese sentido es necesario conocer cada vez con más detenimiento a los niños trabajadores en el mercado, el cementerio o la calle en general.

viernes, 5 de octubre de 2012

Mosoj Yan inaugurará el movimiento “juntos con la niñez boliviana"



En el campo Ferial
Mosoj Yan inaugurará el movimiento “juntos con la niñez boliviana"

El día sábado se inaugurará el movimiento “juntos con la niñez boliviana” en el salón de convenciones del campo ferial de la laguna Alalay, este evento se realizará en marco de la fexpoevangélica 2012.

El evento es organizado por la ONG Mosoj Yan y es apoyado por varias organizaciones e iglesias evangélicas.
Afiche de la inauguración del evento

La Directora ejecutiva de Mosoj Yan, Karina Ribera explicó que este movimiento se inaugurará con el fin de crear conciencia acerca de la niñez boliviana y en particular de la niñez trabajadora y en vulnerabilidad social; y a partir de ello organizar acciones de ayuda en colaboración con otras organizaciones.

A parte de Mosoj Yan esta iniciativa contará con la participación de las organizaciones evangélicas “Juntos con la Niñez y Juventud” y “Compassion”, que colaborará en el aspecto económico.

“Juntos con la Niñez y Adolescencia” es una ONG que promueve la organización de movimientos en apoyo a la niñez y adolescencia trabajadora y en situación de calle en Latinoamérica y el caribe, y mediante estas organizaciones fortalecer el compromiso de las iglesias cristianas con este sector. 

Compassion es una organización cristiana estadounidense que colabora a varias ONGs de asistencia social en Latinoamérica.

viernes, 28 de septiembre de 2012

La autora Jenny Mouzón presenta su libro “¿Por qué me pegas?”



En el Centro Boliviano Americano
La autora Jenny Mouzón presenta su libro “¿Por qué me pegas?”


El pasado miércoles 19 de septiembre en ambientes del Centro Boliviano Americano (CBA) se presentó el libro “¿Por qué me pegas?” de la autora Jenny Mouzón.

El libro relata acerca de la violencia y la vulneración a los derechos de los niños en Bolivia y particularmente en la ciudad de Cochabamba. Uno de los capítulos relata específicamente acerca de la violencia contra los niños trabajadores en sus casas, escuelas y en la calle.
Afiche de la presentación del libro

La autora explicó que cada día aumentan los casos de violencia psicológica, física y sexual contra los niños en Bolivia, y que este problema no es propio de las clases sociales más bajas sino que también va afectando a las más acomodadas, sobre todo a las más conservadoras.

El evento contó con la presencia de niños representantes de la UNATSBO (Unión de Niños y Adolescentes Trabajadores de Bolivia), de la brigada de protección de la familia, de la alcaldía del Cercado, de varias ONGs y personas interesadas en el tema.

A parte de la autora la obra fue presentada por integrantes de la editorial “Escritores Unidos” que publicaron el libro y quienes colaboraron a la escritora en la investigación que sustenta al mismo

jueves, 13 de septiembre de 2012

Mosoj Yan organiza la “Noche sin Techo”



En la plazuela Busch
Mosoj Yan organiza la “Noche sin Techo”



Mosoj Yan, organización de ayuda a los niños trabajadores y de calle, realizó el pasado viernes el evento “Noche Sin Techo” en la plazuela Busch colaborado por varias iglesias cristianas.

“Noche Sin Techo” es un evento en el cual la gente duerme una noche en la calle sólo pudiendo usar frazadas o cartones. La razón de este evento es concienciar a las personas sobre la niñez en situación de calle y recaudar recursos económicos para ayudar a ese sector.

Alistándose para "Noche sin Techo" 
El evento contó con gran concurrencia de personas, quienes desde las 20:00 fueron a pasar la noche afuera de las instalaciones de la organización. La adhesión al evento costaba 30Bs, que serán destinado a la ayuda a los niños en situación de calle y niños trabajadores a través de las diferentes secciones de la ONG.

El evento empezó con la participación de varios números musicales y de baile a cargo de las diferentes iglesias cristianas en colaboración con la institución, que iban desde números de coreografía musical nacional e internacional hasta participaciones de canto de grupos de hip hop y música cristiana.

Al finalizar el evento la secretaria ejecutiva Karina Ribera habló de la importancia del trabajo que Mosoj Yan va realizando y de la necesidad de concienciar a la población acerca de la de la niñez en situación de calle en Cochabamba y Bolivia.

Una vez acabado las actuaciones del evento las personas concurrentes se acomodaron a lo largo de la plazuela y experimentaron la sensación de dormir en la calle.